domingo, 4 de febrero de 2007

Hace un momento veía un documental de la cultura entretenida de TVN, el tema, el por qué de la exageración de las formas en el arte, tomando como primera obra la venus de willendorf. Si uno ata los cabos sueltos de la historia verá que, efectivamente, existe una patología en el ser humano, aumentar todo objeto o acción con el fin de que sea más valorado por él o por los otros.

La visión que los humanos tenemos de nosotros mismos esta bajo ese prisma, de esa patología. El anhelo del hombre es ser el más inteligente, más hermoso, más deseado, de tener y ser más que los otros. Esta patología se convierte incluso en el sustento de nuestra cultura, que como mostraba el documental, se manifiesta en objetos de arte que junto con reflejar el momento cultural de cada tiempo y cada tipo de gentes, muestra esta .
Cómo no hacerse eco de algo que pasa tan desapercibido, cómo es esa necesidad intrínseca del ser humano de asemejarse a esa construcción humana que se llamó Dios, aunque creo que es esa misma necesidad de ser más, lo que nos ha llevado a ser lo que somos en estos tiempos, ni mejores ni peores que nuestros ancestros, pero si con un conocimiento adicional bastante superior del funcionamiento de este grupo de humanos que se aglutinan en lo que se denomina sociedad, conocimiento que nos brinda la posibilidad de construir una mejor sociedad.
La tecnología sobre todo, nos ha permitido horizontalizar las relaciones humanas, pero ahora es cuando se hace más cruenta la batalla porque son más quienes disputan el poder, aunque también hay que rescatar que cada vez más la meritocracia va ganando terreno, aunque no sabemos hasta donde los poderes fácticos lo permitirán.

jueves, 1 de febrero de 2007

¿Cómo se consigue el sueño Bolivariano?

A estas alturas me pregunto , ¿qué mierda es la democracia? Chávez recibe plenos poderes de legislador en la República Bolivariana y los encargados de legislar van a tener que ir por el camino alternativo, si es que existe. La derecha de toda nuestra América querida lo tilda de dictador, los muy cara de raja, incluido el mono, ya saben de quien hablo.
A título personal yo opino lo mismo, pero resulta que yo no estuve tras la milicia imponiendo un modelo económico y un estilo de vida individualista del que irremediablemente formo parte. Con la cara de imbéciles moralinos alzan la voz contra lo que ellos mismos hicieron, el mercurio y sus artículos "democratizantes", si quieren imponernos a todos la abstinencia sexual, están weones los hijos de puta.
Luego de ese desahogo que me salió del alma, continúo. Creo que los poderes del Estado no deben concentrarse ni en el congreso ni en los mandatarios, sobre todo si no existen políticas públicas que obliguen a el uso transparente de ese poder. Por mas que se tengan buenas intenciones, recordemos que el poder corrompe.
Por otro lado, ¿existen personas idóneas para manejar ese poder? O lo del bien mayor debe preponderar ante los males menores, como seguramente va a hacer Chávez, él decidirá lo que es bueno o malo para su pueblo. ¿Cómo administrar una democracia con actitudes poco democráticas?
¿Quién tiene la razón? el poder concentrado o el disgregado. Creo que uno u otro pueden ser efectivos o fatales según el criterio con que se les utilice, con todo lo que ello implica, pero la realidad de esa palabrita es bastante escasa, luego de haber probado los manjares que ofrece el poder.
A grosso modo puedo concluir que para un buen uso del poder, lo único efectivo es una buena regulación de la ciudadanía y un recambio constante de personas responsables y profesionales de su oficio.